¡Hola! Soy Andrés Eichmann. Para que sepan un poco más de mí, pueden leer mi biografía en la página. Por ahora, solo me concentraré en escribir este primer post de mi blog, que nace con esta publicación, y quiero delimitar este texto, porque mi TDA a veces se pone denso y puedo terminar contándoles el concepto de “trasoir” o de la “propiocepción”, y no quiero eso para este post.
Me siento emocionado de comenzar este blog. Llevaba un rato tratando de poner en orden mi cabeza y mis acciones para empezar este proyecto. Por fin algo se acomodó en mí y en el Cosmos, y hoy comienza este nuevo viaje. Les contaré un poco cuál es el objetivo de este espacio. Siempre me ha llamado la atención escribir, y sentía que en las redes sociales no podía tener tanta expansión de palabras e ideología como buscaba. También sentía que no era el foro adecuado para compartir mi pensamiento en crudo. La verdad es que siento que quien llegue aquí estará interesado en buscar una manera nueva de compartir información, salir del molde de las típicas redes sociales como Instagram y todo el séquito de Meta. Tal vez podría tuitear, pero buscaba algo más íntimo y auténtico, por eso la creación de esta página y espacio.
Siento que al realizar este ejercicio de escritura, estoy indagando un poco más respecto a mis habilidades literarias o de comunicación en general. No solo me ayudará a compartir lo que pienso y a ser productivo, sino que también es un ejercicio mental, como si pusiera a hacer abdominales a mi cerebro. Creo que a los dos hemisferios, porque desde mi punto de vista, usaré la parte racional y la parte creativa.
El otro día comencé a escribir el primer post del blog y la verdad no me encantó cómo salió. Trataré en este espacio de escribir desde la honestidad y transparencia. Algo que siempre me ha atraído de los “beatniks” y aclaró que no soy ningún Burroughs, (eso ya lo traté de ser y no salió bien), es el hecho de escribir sin tantas exigencias, dejar fluir el proceso creativo y limitar la corrección y revisión, de esta manera obtener un texto más auténtico y transparente. Así que genuinamente trataré de escribir desde la fluidez y no desde la exigencia. Si tengo en cuenta que quiero que mis posts, artículos, poemas, cuentos, reportajes o lo que sea que vaya surgiendo aquí tenga una curaduría, pero busco que sea algo personal, íntimo y honesto.
Habiendo aclarado que será este espacio que se crea el día de hoy con este post, quiero compartirles un poco de mi presente. Me encuentro escuchando “Music for Animals”, el álbum de Nils Frahm. Últimamente me he encontrado escuchando música de este estilo, artistas como: Olafur Arnalds, Max Richter, Ryuichi Sakamoto, Hania Rani, Alva Noto y Oneohtrix Point Never. Les voy a compartir un poco de cómo llegué a esta música. El otro día me encontraba escalando en Salazar con un amigo y hablábamos de Floating Points, otro artista inglés que también disfruto mucho, y le compartía que fue gracias a Floating Points que hoy me encuentro buscando “música clásica moderna”, como yo la denomino. La verdad es que hay algo en las composiciones de Floating Points que siempre me cautivó, los sonidos peculiares, los ritmos amorfos, pero creo que más que nada era la exploración sonora. Eso es realmente lo que me llama la atención de este tipo de música. Disfruto ver que un álbum tiene canciones de 20 minutos, son buenas para leer. Estas composiciones, en su mayoría me acompañan mientras leo, y me gustaría decir que si leo bastante, diría que ¼ de mi día está enfocado en leer, así que la música de los artistas que antes mencioné me ayuda a focalizarme en mi lectura y además estimular mis sentidos. Siento que la música mainstream o común, no me pone jajaja. Es curioso de pronto compartir mis gustos musicales con las personas a mi alrededor, por ejemplo mi mamá se estresa cuando pongo mi música con sonidos raros, la saca de quicio y me dice que quite mis aberraciones sonoras. Y a mi hermana le duermen mis canciones de 27:03 minutos.
Antes salía mucho de fiesta y ahora que me encuentro compartiendo más tiempo conmigo he encontrado que estas melodías son ideales para acompañarme.
Les dejaré algunas rolas que les recomiendo y también mi playlist de “Clásica moderna”:
- My friend the forest, Nils Frahm.
- HYbr:ID Ectopia Radiation Mechanics, Alva Noto.
- A new day, Suzanne Ciani y Kaitlyn Aurelia Smith.
- Merry Christmas Mr. Lawrence, Ryuichi Sakamoto.
Creo que con esta selección se podrán dar cuenta de lo que escucho últimamente y el soundtrack que acompaña mi vida. Igualmente quiero compartirles dos documentales que volaron mi cabeza. El primero de ellos es “Tripping with Nils Frahm”, dirigido por Benoit Toulemonde. Este fue mi primer acercamiento con Frahm, simplemente me voló la cabeza cuando lo vi y me parece que es esencial para cualquier melómano / cinéfilo. Y el segundo documental que me pareció conmovedor y una gran BioPic es “RYUICHI SAKAMOTO: CODA” de Stephen Nomura Schible. Con esta obra pude entrarle más de lleno a conocer a Sakamoto, y me parece admirable ver a un gran ser humano como lo era Sakamoto enfrentado a una dura y difícil realidad, luchando contra el cáncer, pero aún así componiendo y nunca dejando de florecer como artista, los dos documentales los encuentran en el bello MUBI <3.
Creo que un poco esta música me ha ayudado a conectar con mis presentes, me ha facilitado observar los detalles de la vida, cosa que antes no realizaba, también me ha ayudado a prestar mayor atención. Les comparto con amor un poco de mis gustos y de lo que me funciona el día de hoy.
Amor y Paz, Andrés.
